Esta receta me la pasó una persona que yo quiero y admiro muchísimo. Y la admiro por su nobleza, por su coraje frente a la vida, por sus ganas de siempre seguir adelante, de nunca quedarse quieta. Mi querida Nora, un regalo que me dio la vida.
Por supuesto que, a su riquísima receta, le puse mi toque personal y ahora disfruto de esta exquisitez de delicioso buen gusto.
En el mercado
3 o 4 tomates
4 cucharadas de azúcar
2 dientes de ajo
1 cucharada de orégano
Sal y pimienta negra, a gusto
3 cucharadas de aceto balsámico
Aceite de oliva, a gusto
En la cocina
1) Cortar los tomates en cuartos y luego en octavos.
2) Colocar los tomates sobre una placa con aceite de oliva y acomodarlos de costado.
3) Sazonar con la sal, la pimienta y el azúcar.
4) Agregar el orégano, los dientes de ajo picados, el aceto balsámico y el aceite de oliva.
5) Cocinar en horno precalentado a 180°C durante aproximadamente 25 a 30 minutos o a 150°C durante 1 a 1 ½ hora.
6) Retirar del horno y dejar enfriar a temperatura ambiente.
Para acompañar su preparación les dejo esta canción que descubrí por azar y que me gusta escuchar mientras cocino. Harry and Bess, de Ferraby Lionheart.
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